
Una actriz adelantada a su tiempo
Entrega el 11 de abril de 2025
Nos enfocaremos en tres de sus filmes: El Portero de Noche (The Night Porter, 1974), La Piscina (Swimming Pool, 2003) y 45 años (45 Years, 2015).
Creemos que hay un rol que falta en su carrera, el de una Eloísa anciana.
Sus interpretaciones
Debemos confesar que en la primera película en que vimos a Charlotte Rampling, su interpretación no nos deslumbró, digamos que el personaje era demasiado bondadoso dentro del nido de víboras que desfila en "La caída de los dioses" ("The Damned") de Lucchino visconti, por lo tanto, no reseñaremos ese rol.
Cuando aparece en "The Night Porter", de Liliana Cavani, la situación es otra, es un rol fascinante, que difícilmente podría haber sido interpretado por otra actriz. La película transcurre el año 57 en Viena, muestra el reencuentro, tras 13 años, de Lucia, una prisionera de un campo de concentración nazi con Max, su captor (interpretado por Dirk Bogarde), de quien se había convertido en amante durante el cautiverio. Rampling es capaz de mostrar los matices el personaje: en los raccontos se ve el miedo y asco iniciales ante los abusos a los que es sometida, pero también se ve cómo la relación se transforma y cómo termina involucrada (como causa) en los crímenes que ahí se cometen. En las escenas del reencuentro y el restablecimiento de la relación, transmite la dualidad de Lucia, que es víctima, pero también cómplice y en cierta medida victimaria de su antiguo captor, quien a pesar de sus actitudes violentas, en realidad está sometido a las dinámicas y a la voluntad de su antigua prisionera.
En "The Swimming Pool", de Francois Ozon, Rampling interpreta a una escritora inglesa, Sarah, bastante fumadora y bebedora, que está en una etapa de cuestionamiento y fastidio por sus novelas, best sellers policiales de lectura rápida para mujeres adultas. Lo anterior se hace evidente cuando se encuentra con una de sus lectoras en el metro y niega ser la autora del libro que ésta va leyendo. Ante esta crisis y sequía creativa, su editor le presta su casa en el sur de Francia para que se relaje y escriba. Al inicio, todas son buenas intenciones, deja el cigarrillo, el alcohol y empieza una vida sana, la escritura fluye, todo es perfecto, hasta que una noche llega la hija el editor, Julie (Ludivine Sagnier), una joven sexualmente muy liberal, bebedora y llena de inestabilidades. Es interesante como se desarrolla la relación entre ambas, demasiado parecidas para ser amigas y en etapas vitales aparentemente muy distintas. Rampling refleja brillantemente, con la sobriedad y exactitud que la caracteriza en sus interpretaciones, la envidia que le genera la juventud de Julie frente a su propio envejecimiento, lo que se plasma en la interacción que tienen en el entorno de la piscina que hay en la casa. Finalmente los eventos llevan a que se establezca una relación de complicidad y apoyo entre ambas, quedando la duda de si la Julie de Sarah existía o era un reflejo de sí misma.
En "45 años" (45 Years), del director Andrew Haigh, Rampling interpreta a Kate, una jubilada que está próxima a celebrar el aniversario 45 de matrimonio junto a su marido Geoff (Tom Courtenay), un hombre apagado y bastante apático, pero con quien mantiene una buena relación. El detonante del film es un correo dirigido a Geoff en que le avisan que, debido al derretimiento de un glaciar en Suiza, han encontrado el cadáver congelado de su novia de la juventud. Desde este punto se desarrolla toda la trama, desde la nostalgia enfermiza que invade a Geoff por su novia muerta, hasta la infinita amargura que invade a Kate cuando se da cuenta que toda su vida matrimonial estuvo determinada por la pérdida de su marido. Una vez más, Rampling es capaz de transmitir la desolación, la desesperanza y la tristeza. La expresividad de sus movimientos y la interpretación de los diálogos consiguen llevar al espectador a tomar partido y sentir el vacío en que la deja descubrir que no fue más que una sustituta y que, si Geoff tuviese la fortaleza necesaria, la dejaría para ir a rescatar los restos e su antiguo amor.
Creemos que Charlotte Rampling es una actriz que aún tiene mucho que entregar, si bien estos últimos años la pudimos ver en Duna, hay roles en que solo ella sería capaz de encarnar al personaje, uno de ellos es el de la sabia medieval Eloísa en su vejez, si bien la película no existe, esperamos que algún guionista tome el tema.
No encontramos su web, pero sí la página de su fan club: Fan account
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